En un ay

Veintinueve de mayo. Decimo octava de feria. Tres cuartos de entrada, con algo de viento. Los papelillos en el ocho. Se guardo un minuto de silencio por Víctor Barrio, que hoy cumpliría treinta años.

Toros de José Luis Pereda y la Dehesilla, desigualmente presentados, flojos. El quinto impresentable, y el sexto un toraco. Mas de cien kilos de diferencia entre uno y otro. Bueno el tercero.

Gonzalo Caballero, puso a la plaza de los nervios en el sexto. Un toraco, que se fue al de puerta suelto, se arrancó de largo a Bernal, el de tanda, en otras dos varas. Le paró bien Curro Robles y su matador se lo llevó a los medios. De largo se los tragaba, pero en cuanto que había cercanías y el muletazo era por alto, los enganchones y el peligro se hacian patentes. Valiente y entregado estuvo el torero, en una faena que termino con una estocada atravesada, y escarbando con aquella estocada puesta, aviso y descabello. Dió la vuelta al ruedo con alguna protesta. Pero se la jugó. En el buen tercero, al que despachó de una estocada en todo lo alto, de efectos fulminantes y para optar a los premios, anduvo muy frio, correcto, pero los nervios o la falta de sitio, le impidieron estar a la altura. Había brindado al cielo y saludó tras acabar con su enemigo.

Morenito de Aranda, estuvo correcto con el capote en sus dos toros. El primero, muy flojo, perdió las manos, cuando la muleta iba baja. Pinchazo y media tendida. Se fue a porta gayola en el cuarto, y el toro pasó de el. Allí en chiqueros le dio capotazos de recibo con pocas apreturas. Flojo también, se cayó en el segundo puyazo, tras el primer par, en la faena de muleta. Un remate con la mano izquierda sensacional y algun muletazo de adorno,  instrumentó   Morenito antes de una media caida, un aviso y un bajonazo de aupa.

Fandiño se fajó con un segundo encastado, pero justo de fuerzas. Apenas picado, se cambió el tercio, entre protestas. En la muleta tuvo transmisión y el diestro le sacó algun buen natural, y algun enganchón. Acabo con bernadinas y una estocada trasera tendida y descabello. Saludos. Y con la birria que hizo quinto,  se fue a la puerta de chiqueros, brindó al público y aguantó cabezazos. Descompuestas embestidas tuvo este toro, para mi, el peor del encierro, Estocada caida y se acabó la feria para los tres.