24 de mayo. décimo quinta de feria. Nada. ¿Hay algo peor?

Lleno de “No hay billetes”. Mucho calor.
Toros mansos y descastados de El Torreón, ganadería que sustituyó a la anunciada de Román Sorando. Fue devuelto a los corrales el segundo, siendo sustituido por otro manso de Carmen Segovia. El primero sin picar, aunque derribó, el segundo rehusó caballos, escarbó, se fue suelto a chiqueros, el tercero, nobilísimo, fue el mas flojo, el cuarto recibió un puyazo en el de puerta, tras salir huido, el quinto tenía las fuerzas justas, esperó y apretó en banderillas. Saludó Curro Javier, que se pegó una costalada, al tomar el olivo. El sexto fue el mas peligroso, también se fue suelto al de puerta. Correcta presentación. Primero, cuarto, quinto y sexto, cinqueños.
A Juan Mora, le sacaron a saludar, tras romperse el paseíllo. Hizo extensivo, el saludo a los otros dos matadores, rehusando Cayetano. Comenzó la faena con pases por bajo, sufriendo algún enganchón. No se confió en ningún momento. Mató de estocada trasera. Quizás este toro hubiese podido romper, de meterse mas con el. El altísimo cuarto, tras los lances de recibo, fue mal picado. Unas verónicas y algún muletazo tuvieron empaque, muy en la línea de este torero, con los pies juntos y bajando mucho el engaño. Tras estocada trasera y algo tendida, fue aplaudido, y al salir a saludar, alguna muestra de desagrado.
Manzanares comenzó su faena con un desarme, y sobre la diestra se lo pasó muy lejos, dándoselos de uno en uno. Trató de justificarse y le puso en manos de las mulillas de una estocada. Al quinto, mas de lo mismo. El toro con la cara arriba y sin recorrido. Una tendida y a otra cosa, mariposa.
Cayetano, dispuso del mas noble y del mas peligroso. Al noble tercero, le sacó a los medios con muletazos por alto, muy compuesta la figura. Luego, derechazos pasándoselo muy lejos, sin quedarse quieto en ningún momento. No dijo nada y no llegó a nadie. Estocada tendida. El sexto, se frenó de salida, echando las manos por delante. Ya comenzó la faena sufriendo un achuchón, para luego con la izquierda, ver como el toro se quedaba en las zapatillas. En los medios, estocada tendida, entrando muy rápido.
¿Hay algo más aburrido en el mundo que una corrida de toros, sin toros? Nada. Y las figuras empeñadas en ello. ¡Que aburrimiento! Ya podían haber toreado la novillada de ayer.