Picadores

Nos dieron la tarde los de aúpa. Difícil escoger al que peor hizo la suerte. Sembraos estuvieron los tíos. Pero puestos a escoger, un tal Mercado en el primero preparó una escabechina de no te menees. El sexto, de apellido Rosales, no quería salir de las tablas, barruntando que el porrazo era inminente, así fue. Pero lo malo es que dejó al toro entero, de tal manera que en la muleta de Venegas, la plaza fue un !ay¡ Que sufrimiento, el ver a un torero tan poco placeado con aquellas embestidas tremebundas que pegó "Macetero" Que de gracias al que sea, porque si está vivo es de milagro. Valiente, hasta llegar a la inconsciencia, fue volteado y dejó a los asistentes al borde del infarto.  En el cuarto, hizo un quite a Adalid a la salida del tercer par que tuvo usía. Adalid le debe una de gambas, si no es algo mas. Se acordará del día que confirmó la alternativa. Cuadri presentó una corrida en su linea, aunque bajasen algo el segundo y el sexto, pero que no dieron juego y que llegaron desfondados a la faena de muleta. Se aplaudió al primero, aunque fuera como desagravio a la que le había preparado el varilarguero, y al tercero, tampoco se bien por qué. Castaño debía de ser uno que anduvo por alli con un vestido blanco, pero la verdad es que estuvo desafortunado, no encontrando nunca el sitio y citando muy fuera de cacho. Es crítica, pero fue delante de un toro. Hay otros, que con un perro les vale para ponerse en el mismo sitio. En la lidia del cuarto hubo un resplandor en la plaza, cuando Galán pegó un capotazo tras el primer puyazo, mas largo que todos los toros de Cuadri juntos. También estuvo soberbio en la lidia del segundo. Bien en banderillas los rehileteros de Castaño aunque sin llegar a lo excelso. De Iván García entresacaremos unas verónicas de recibo al tercero y que estuvo muy mal con los aceros.

 Sol, calor y tres cuartos de entrada. Saltaron dos inadaptados cuando estaban descabellando al cuarto.